Seguidores

9 de enero de 2012

Quiéreme cuando menos me lo merezca, porque será cuando más lo necesite..

Sé que a veces soy insoportable, no quiero saber nada de nadie, digo cosas que luego me arrepiento, hablo mal a las personas que más me quieren y que siempre están conmigo. Sé que a veces soy un poco egoísta, solo pienso en mí, por encima de todo, sé que a veces pongo de los nervios, sé que a veces quiero escapar a otro lugar en el cual nadie me moleste, sé que a veces solo quiero encerrarme en mi habitación y no saber nada de la gente de mi alrededor. Pero también sé que cuando estoy así es porque necesito que alguien me quiera de una manera diferente. Así que quédate conmigo, y sí, quiéreme cuando te lo pido, quiéreme aunque no quieras, solo un poco… Quiéreme aunque no estés presente, quiéreme cuando te miro, quiéreme cuando te beso, quiéreme cuando te quiera. Sobretodo quiéreme cuando menos me lo merezca, porque será cuando más lo necesite..




3 de enero de 2012

Ahora empieza la tormenta.

Estabas más guapo cuando yo te miraba, eras más bonito sin ropa y sin los ojos rojos de tanto olvidar besos en botellas de ron. Eras más dulce con sabor a Colacao por las mañanas y seguro que tus besos ya no saben igual, seguro que nadie te besa tan suave, ni con tanto amor. Eras mucho más bonito en mi balcón, sin camiseta y oliendo a Marlboro y pasión. Estabas más guapo, y más tú. Más borracho de amor sin alcohol, más ciego de ratos bonitos.
Yo era más dulce sin sabor a ginebra, sin besos que no siento, sin resaca y sin sexo sin amor. Más cuerda y más sensata. Menos predecible. Ya no sé pensar cuando grito, ni cuando beso, ni cuando bebo. Ni si quiera cuando escribo. Ahora vivo rápido, sin sentir y sin pensar; que el pensar hace daño. Y ahora es tiempo de vida, de domingos de resaca sin tu espalda. Ahora empieza la tormenta, ya llegará la calma.